
Pero no para todos fue así. El concierto contó con la presencia de numeroso público sin entrada, así como una afluencia de espectadores superior al aforo máximo establecido en el contrato, de 75.000 personas, mientras que se vendieron más de 80.000 localidades. Miles de espectadores se quedaron sin poder ver el último concierto de Héroes del Silencio; el gran atasco que se formó en la A-3 y en la A-7, provocó que mucha gente tuviera que escuchar las canciones desde la carretera, sin poder ver nada,algo, seguramente, muy frustrante para los fans. Centenares de personas de toda España se han inscrito ya en una página web creada por los afectados que no pudieron asistir al concierto en el Circuit Ricardo Tormo. Su objetivo es reclamar ante la empresa responsable, Rock and Chicken, la devolución del dinero de las entradas, además de 60 euros por combustible, y 200 euros por daños y perjuicios. Los fans del conjunto zaragozano se están organizando para reclamar tanto ante la empresa como ante las oficinas del consumidor. Algo que en mi opinión, veo totalmente normal, ya que lo que pasó esa noche fue totalmente una injusticia, todos pagaron, todos tenían derecho a ver el concierto,el cual, seguramente mucha gente, llevaba esperando muchísimo tiempo.
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